Aromaterapia

NARANJA, CANELA y CLAVO DE OLOR


Maravilloso aroma y gran poder de permanencia. Ideal para los dormitorios. Puede ser recalentado para perfumar los ambientes por más días. ¿Qué necesitás? 1 naranja, 2 ramas de canela o 2 cucharaditas de canela en polvo, 1/2 cucharada de clavos de olor entero o 1/8 de cucharadita del molido














Aroma de Canela



 
Aceite de Coco

El aceite de coco se extrae por primera presión de la pulpa y la piel de los cocos, es refinado para evitar que se ponga rancio. 

   En los jabones actúa como humectante creando una capa protectora en la piel, y les aporta espuma y dureza.

   Es muy recomendable para pieles irritadas, inflamadas y sensibles siempre y cuando su porcentaje no sea superior al 25-30%.


Aceite de Almendras

    En nuestras casas hemos visto utilizar el aceite de almendras especialmente en la piel de niños y ancianos, porque es perfecto para pieles sensibles y frágiles.
 Nutre y suaviza dando elasticidad, repara y nutre las pieles deshidratadas y descamadas, calma las pieles irritadas y alérgicas aportando gran hidratación y previene estrías y arrugas sin obstruir los poros.

    En general mejora el aspecto y el estado de la piel.


Aceite de Avellanas

  El aceite de avellanas se caracteriza por ser muy rico en vitamina A y su alto contenido en vitamina E. 
  Contiene sustancias reguladoras de las glándulas sebáceas siendo también hidratante y protector. Estas características lo hacen idóneo para pieles grasas y mixtas.

Es un vehículo ideal para los aceites esenciales por tener gran capacidad de penetración en la piel.

También es importante su empleo en pieles dañadas, para suavizar cicatrices y en los cuidados contra el sol.  



Aceite de Palta

   Posee un amplio abanico de vitaminas: A,B,C,D,E,K
   Regenera, reestructura la epidermis y actúa contra el envejecimiento cutáneo.
   Es un aceite de rápida absorción, lo que lo hace ideal como medio de transporte para otros activos que utilicemos. Se utiliza por mucho en tratamientos anticelulíticos y reafirmantes.



 Aceite de Jojoba

  Lo que denominamos aceite de jojoba, no es verdaderamente un aceite, sino una cera líquida, la única cera líquida vegetal que existe.
  Es el aceite ideal para cualquier tipo de piel, aportando a cada una aquello que necesita. 
  En pieles secas hidrata es humectante y controla la descamación, en pieles grasas disuelve los depósitos sebáceos regulando la secreción excesiva, y es eficaz  contra los puntos negros y espinillas.
  Suaviza, aumenta la elasticidad y la firmeza, facilita la regeneración celular, actúa como antioxidante y protege de los radicales libres. Es descongestionante y emoliente.
   Es utilizado en tratamientos cosméticos de alto nivel.


  Manteca de Mango

   La manteca de mango se extrae prensando en frío la semilla del fruto, tiene propiedades emolientes, cicatrizantes y regeneradoras.
   Es muy útil cuando hablamos de dermatitis, eczemas y erupciones cutáneas. Alivia el picor y trata pequeñas heridas en la piel. Nos resulta eficaz contra la fatiga tensión muscular.
   No es grasa, se deshace al contacto con la piel y se absorbe fácilmente.
   Es una aliada de lujo para las pieles secas, con falta de flexibilidad y ásperas.


Manteca de Karité

  El árbol de karité crece salvaje en la sabana africana, del prensado mecánico de las nueces que produce se obtiene la manteca de karité. Las mujeres africanas la vienen utilizando a lo largo de los tiempos como producto de belleza, protección y cuidado para su piel.

  Es muy rica en vitamina F mejorando los síntomas que la carencia de esta suponen: enrojecimiento, sequedad y descamación.
Hidrata, nutre, regenera, suaviza y protege los tejidos, mejora la elasticidad y previene el envejecimiento de la piel y es un potente anti estrías y anti arrugas.

  Es apropiada para cualquier tipo de piel, incluso en casos de acné porque no es comedogénica, y da excelentes resultados en pieles que tienen que soportar climas fríos.
  Nos ofrece una alta protección solar (aunque no sea posible numerarla) y aplicada después del sol favorece un bello y duradero bronceado.

  Es una de mis favoritas y está presente en la mayoría de mis jabones.


Aceite de Rosa Mosqueta

  El alto contenido en ácidos grasos esenciales relacionados con la síntesis del colágeno hace del aceite de rosa mosqueta un excelente regenerador para nuestra piel.
   Es uno de los aceites más utilizados en cosmética para tratar el envejecimiento, las arrugas y las estrías.
   Es humectante incluso en las zonas más propensas a la sequedad como codos y talones.
   Muy importante resulta su utilización en manchas de pigmentación, varicela, cicatrices y marcas por quemadura.
   No se debe utilizar en pieles grasas porque causa efecto rebote.


Aceite de Pepita de Uva

   Es fuente importante de ácidos grasos y aporta a la piel flexibilidad y aspecto más joven.
   Emoliente, regenerador e hidratante, afirma y tonifica la piel.
   Es importante su empleo en pieles con acné y contra la celulitis.

 Aceite de Argán

Es rico en Vitamina E y ácidos grasos esenciales, resultando un gran aliado en tratamientos anti envejecimiento para la piel y también para el cabello.
  
   Aporta aspecto saludable a cualquier tipo de piel, combate líneas de expresión y "patas de gallo", trata cicatrices y manchas pigmentarias por lo que ayuda en casos de acné mientras previene también nuevos brotes.     

Resulta muy eficaz en la lucha contra las estrías y la flacidez, repara y nutre la piel seca (incluso en las manos) y, por supuesto, está a la vanguardia en tratamientos contra dermatitis, psoriasis y alergias.
   Por último recordar que es un aceite adecuado para el cuidado de la piel de los niños y como after-sun.